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La Voz de Gran Canaria

A los ciudadanos de Telde

A los ciudadanos de Telde

AURELIANO FRANCISCO SANTIAGO CASTELLANO

Sin duda lo acontecido estos últimos días en nuestra ciudad, ha llenado de vergüenza e indignación a miles de ciudadanos y ciudadanas de bien de este archipiélago nuestro. Aún no recuperados de titulares y testimonios de semanas atrás, que hacían referencia a escándalos y tramas de corrupción político-empresarial de gran calado, un nuevo episodio estos días, ponía a nuestro municipio en un penoso candelero de la actualidad informativa insular y estatal. La connivencia entre negocio y política, denunciada desde hace tiempo desde nuestras filas y que señalaba directamente a determinadas actuaciones de cargos públicos en el ámbito local y canario, explosionaba con toda su crudeza judicial, policial y mediática después de meses de ser un silencio a voces. La ya conocida detención de la portavoz y dirigente del PP de Telde, Dña. María Antonia Torres, así como de otras personas vinculadas directa o indirectamente con su persona y su partido, viene a suponer sin embargo para los teldenses, mucho más que un episodio a sumar a la cadena de acusaciones firmes y causas abiertas por corrupción, a militantes y dirigentes significativos del partido que lidera en las islas D. José Manuel Soria.

Desde el acceso al poder del alcalde Francisco Valido con el pacto de gobierno PP-AFV-CIUCA, Telde ha vivido la mayor inestabilidad política de su historia reciente y el más bajo nivel de gestión pública de las últimas décadas. El miércoles pasado estas fuerzas políticas sumaron a este triste balance, el haber consentido por acción u omisión el más vergonzoso escándalo político vivido por nuestra institución local desde la recuperación de la democracia. El grupo de gobierno PP-AFV-CIUCA, con su alcalde al frente, ha terminado de consolidar esta semana la mayor crisis de credibilidad vivida por nuestro ayuntamiento en toda su historia.

Telde es a día de hoy un municipio sin gobierno y sin timón, bajo sospecha judicial e investigación policial. Padece ya de forma galopante las consecuencias de una creciente falta de credibilidad institucional por parte de ciudadanos, proveedores y entidades de todo tipo. Hoy el nombre de nuestro municipio es presa de titulares que nos avergüenzan a todos y que colocan a nuestro ayuntamiento en el descrédito más absoluto. En tres años de alianza PP-AFV-CIUCA y de silencios y complicidades recientes del CCN, Telde se ha convertido en un triste garabato de la ciudad puntera y orgullosa que despuntaba a principios del 2003. Ese fracaso tiene responsables políticos directos, con nombres y apellidos. No es de recibo que el alcalde de esta ciudad se entere por los medios de comunicación de lo que ocurre en su municipio. No es asumible sólo cesar de sus funciones a Dña. María Antonia Torres o anunciar comisiones de investigación paralelas, cuando lo que realmente la ciudadanía le exige es que asuma la máxima responsabilidad política que decía ostentar. Es políticamente incalificable, pero públicamente esclarecedor, que quien ha acusado y calumniado a gobernantes anteriores durante años, ahora despeje balones fuera y no se desvincule de un socio de gobierno que sí está siendo investigado y viendo encarcelar a algunos de sus miembros por presunta corrupción.

El silencio convierte en cómplices morales a quienes se han limitado a mirar hacia otro lado, a consentir, a entender como sacrificio útil todo lo que conllevara a no dividir lo que sólo estaba unido por intereses inconfesables.

Telde merece, necesita y demanda, hoy más que nunca, el final de este proceso de descomposición social, política, económica y moral en que vive inmersa. Telde no merece este desgobierno y sus vergüenzas por más tiempo.

No merece las complicidades que lo mantienen y por tanto demanda que su ciudadanía vaya articulándose en torno a la idea de un castigo ejemplar en las urnas a los culpables de este desaguisado. Telde merece retomar de nuevo la conquista de los horizontes y la senda que no debió de abandonar nunca.

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