La isla más bonita del mundo
[...] Con todos los respetos, señor presidente, las bellezas naturales de Tenerife, la iniciativa de su sector turístico y de sus gentes son inigualables. No se pueden mezclar Tenerife y su provincia con otras peculiaridades de la isla redonda o de Lanzarote y Fuerteventura, porque nada tienen que ver. Pero las mentes amarillas parece que mandan en el Archipiélago. [...]
Consulte la editorial publicada en El Día (Santa Cruz de Tenerife), 20-11-2005
0 comentarios