Los agricultores grancanarios sufren la peor zafra de los últimos años y exigen que se controle mejor la entrada de plagas

Los expertos la definen como "la peor zafra de la historia". Las expectativas no se cumplieron. Los cultivos de tomates de este año en el Sureste tenían todas las de ganar, cultivos inmejorables, fruto de calidad y mucha ilusión. Sin embargo, un invierno demasiado frío, unas infraestructuras que van a peor y la avalancha de productos europeos hacen que la zafra que termina esta semana se coloque, sin remedio, en el puesto de las peores de los últimos años.
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Roberto Góiriz, presidente de la Federación de Exportación de productos hortofrutícolas (Fedex), la define como "la situación más crítica en la agricultura del Sureste", y afirma que "los precios obtenidos en esta campaña son desastrosos, la tormenta tropical Delta estropeó la fruta de buena calidad y las bajas temperaturas han causado la aparición de virus y hongos en los cultivos".

La producción ha bajado un 10% respecto al pasado año y si se compara con la zafra del 2001 -la última antes del virus de la cuchara- la reducción sería de un 25%. Según Góiriz, teniendo en cuenta que la mayoría de los problemas han sido causados por la meteorología, la solución más apropiada para motivar el sector estaría en un cambio radical en la estructura de los invernaderos.

"Hay que tener en cuenta que la humedad y las bajas temperaturas se pueden evitar con buenos invernaderos en la zona". En cuanto a la mano de obra, asegura que el Sureste es una zona pionera a la hora de trabajar con extranjeros. Sin embargo, muchos agricultores, ante la grave crisis agrícola no tienen presupuesto suficiente para contratar tantos trabajadores como quisieran.

Antonio Vega, presidente de la Cooperativa Hortofrutícola San Rafael, pide una motivación por parte de las instituciones para poder remontar y salir adelante en la próxima campaña. "Las instituciones deben controlar mejor la entrada de productos europeos a la Isla, ya que parece mentira, pero tenemos más de 97 virus diferentes, no podemos competir con eso". Afirma que la Administración ha dejado de lado la entrada y salida de productos y de esta forma se encuentran ahora los agricultores con los virus.

"Eso se debe controlar porque llegará el momento en que ya no se pueda hacer nada, ya hay virus que ni conocemos. No se ha puesto mano dura a este asunto y así vamos como vamos, se están cargando la agricultura de la comarca". En la cooperativa San Rafael han apostado por el trabajo de extranjeros, como rumanos o polacos, "lo importante para nosotros es que la gente tenga ganas de trabajar".

También se han arriesgado con los invernaderos de alta tecnología con los que trabajan desde hace tiempo, "protegen mejor los cultivos, sobre todo en el caso de las bajas temperaturas". Sin embargo, asegura que son pocas las ayudas que se dan para la reforma de las estructuras de invernaderos. "Ahora que pasamos por este mal momento las necesitamos más que nunca". Según Roberto Góiriz, la Fedex y la Consejería de Agricultura están en negociaciones para valorar las posibles ayudas y soluciones ante la escasa producción de esta zafra.