Aunque se puede hacer, el comité de expertos recomienda no reconstruir el Dedo de Dios en Agaete

El equipo multidisciplinar constituido a raíz de la caída del índice de piedra el pasado 29 de noviembre, ha concluido en un informe que la agresividad del entorno marino en el que se ubica el "Roque Partido", -el símbolo grancanario más popularmente conocido como "Dedo de Dios"- limita la viabilidad de su reconstrucción, al tiempo que descartan la realización de trabajos para conservar lo que queda. Al mismo tiempo, cabe señalar en la localidad italiana de Asís, han sido capaces de reconstruir los frescos de su Basílica medieval destruídos en más de 300.000 fragmentos por un terremoto, lo que demuestra que no es en modo alguno imposible reconstruir -si se quiere- el Dedo de Dios
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El comité de expertos está integrado por el ex alcalde de Agaete, José Antonio García; el doctor en Ciencias del Mar, Pedro Sosa; el abogado urbanista Normando Moreno; la jefa de sección de Suelo Rústico del Area de Política Territorial del Cabildo de Gran Canaria, Pilar Rivero; el catedrático de la Universidad de La Coruña e ingeniero de caminos Fernando Martínez, y el doctor en Ciencias Geológicas de La Coruña, Jorge Delgado.

Opinan que "la multiplicidad del tamaño de los fragmentos producto del colapso, la dificultad de recuperar el 100% de los mismos y el deterioro de la base sobre la que el "dedo" caído descansaba, determinan la práctica imposibilidad de su restitución".

"Es muy difícil recomponer el mosaico de fragmentos rotos", expresan en el estudio, en el que precisan que, en caso de que se decidiera su reconstrucción, las obras serían "muy arriesgadas para la seguridad de los trabajadores".

Todos los miembros coinciden en la "enorme tristeza que provocó la pérdida de un símbolo geológico convertido en emblema de la isla, más allá de su valor como recurso turístico".

Por ello, con el fin de evitar que desaparezca de la memoria colectiva, han propuesto la elaboración de un proyecto que, a partir de técnicas acústicas y lumínicas, por ejemplo mediante la ubicación de laceres, un haz de luz cenital o un espejo reflector sobre el Roque, le dote de un valor estético añadido.

Los especialistas creen que, además de que su coste económico sería "moderado o bajo", ello atraería a numerosos visitantes por el espectáculo de luz y sonido que supondría y, aunque tendría consecuencias sobre la fauna, se adoptarían medidas para evitarlas.

Además, plantean la construcción de un monumento escultórico en la cima del acantilado situado tras la roca, que evoque la evolución de ésta, e instalar un observatorio en la plataforma que culmina el actual dique del Puerto de las Nieves, dotado de paneles explicativos de su historia y procesos erosivos.

Asimismo, entre sus aportaciones, sugieren solicitar al Gobierno de Canarias que declare "El Dedo de Dios" como Monumento Natural y modificar el escudo del Ayuntamiento de Agaete para incorporar la forma originaria del monolito, así como constituir una fundación, representada por figuras relevantes de la sociedad canaria, que desarrolle las iniciativas que se acuerden.

El alcalde de Agaete, Antonio Calcines, ha manifestado que, según el estudio, que no es vinculante, la reconstrucción sería "muy engorrosa; la financiación para intentar conformar el puzzle, muy elevada y las garantías de que perdure en el tiempo, muy cortas".

Con treinta metros de altura, la pérdida del pináculo, de seis de ellos, pertenecientes al "Dedo de Dios", sumió especialmente a los canarios y, sobre todo, a los agaetenses, en una sensación de vacío y después del suceso no han cesado de llegar a la villa foráneos para ver in situ la desgracia.