Volver al campo

42 parados cultivan en la finca de El Viso para dar comida a las parroquias costeras. Un convenio forma a desempleados en la finca municipal y genera alimentos para los necesitados.

A. J. F.

Un grupo de 42 parados en riesgo de exclusión social concluye estos días su participación en un proyecto en el que, además de aportarles conocimientos en el mundo agrario, también traerá consigo un peculiar efecto secundario: la obtención de cosechas con las que abastecer de alimentos a los más necesitados del municipio.

La iniciativa, que se desarrolla en la finca municipal de El Viso de Montaña Las Palmas a través del convenio de Zonas Agrarias Deprimidas (ZAD), se centra en el desarrollo de diversas técnicas agrícolas -como los trabajos en viñas y con sterlitzias, el acondicionamiento de zonas comunes y jardines y la creación de huertos, semilleros y zonas- y en la ampliación de formación teórica mediante la entrega de distintos carnés de manipulador de alimentos y productos fitosanitarios.

Pero una de las principales novedades de la edición de este año del ZAD es que "las habichuelas, las papas, los calabacinos, la uva y el resto de productos que se recojan no será entregados al área de Servicios Sociales, sino a las parroquias de la zona costera, como son las de La Garita y Melenara-Clavellinas", según avanzó ayer la concejala de Agricultura y Pesca, María González Calderín.

La munícipe detalló que había recibido una solicitud en tal sentido desde las iglesias de aquellos barrios y que estas, a través de sus grupos de Cáritas, serán las encargadas de distribuirla la citada ayuda entre las familias más necesitadas. "De la iniciativa también se beneficiarán los vecinos de Casas Nuevas", apostilló al respecto.

En principio, el trabajo de formación en la finca de El Viso concluirá a finales del presente mes. Pero ayer mismo la actividad era incesante en la explotación, ya que los desempleados ocuparon toda la mañana en plantar una remesa de 800 cogollos de lechuga que dentro de unas cuantas semanas solucionarán más de un almuerzo.

Una de las parcelas reservadas en El Viso para la plantación de la vid ha sido ’rescatada’ con el fin de poder darle otros usos. Igualmente, la creación de zonas de compostaje, utilizando gusanos, ha sido otra de las actividades que ha gozado del aplauso de la mayoría de los participantes dadas las perspectivas de futuro de este sistema para generar abono.

Una vez que finalice su formación práctica, los integrantes del convenio podrán disponer de la asistencia técnica necesaria en la Concejalía de Desarrollo Local del Ayuntamiento con vistas a la búsqueda de nuevos yacimientos de trabajo, bien en la localidad bien en el resto de la isla.

La Provincia, 8-10-2013