Vecinos de Arguineguín temen por su salud por los residuos de los 'cayucos' de la inmigración africana

Los vecinos del barrio pesquero y turístico de Arguineguín (Mogán) temen que la acumulación de pateras y cayucos atracados en el puerto pesquero, así como los que están hundidos y varados junto a la Cofradía de Pescadores, puedan provocar algún perjuicio para su salud.
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Los residentes en la zona, que disfrutan a diario en las playas situadas a pocos metros de la zona, temen que el mal estado de alguno materiales orgánicos sea insalubre. Las pateras y cayucos se acumulan tras la incesante llegada de inmigrantes irregulares, a la espera de una orden judicial que autorice su retirada y posterior incineración.

Entre los principales enseres que se encuentran en el interior de las embarcaciones hay bidones de gasolina utilizados para la travesía, alimentos, prendas de vestir de los inmigrantes, motores fuera borda, mantas y guantes, a los que rodean numerosos insectos. A pesar de que el Ayuntamiento de Mogán no tienen competencias sobre el asunto, los vecinos solicitan su apoyo ante las administraciones responsables para agilizar los trámites de destrucción de los restos de las llegadas de inmigrantes.

Las embarcaciones no sólo se han convertido en una visita más que realizan los turistas a la localidad, sino que preocupan a los marineros de la Cofradía de Pescadores, quienes a diario realizan sus maniobras de atraque y desatraque muy próximas al lugar. La llegada de los cayucos y pateras arrastrados por embarcaciones de Salvamento Marítimo o de la Guardia Civil se ha convertido en una actividad más para los vecinos, que aprovechan para acercarse al puerto y contemplar el desembarco de inmigrantes, al tiempo que ven como se acumula una nueva embarcación.

A ellos se unen los turistas, quienes desde cualquier terraza o balcón de sus residencias turísticas divisan la llegada de inmigrantes y la algarabía que se produce en la zona.La mayoría aprovecha la ocasión para tomar fotos y así llevar un recuerdo más de las islas, tras vivir el fenómeno de la inmigración irregular muy de cerca.

Reproducido de: El Independiente de Canarias, 23-7-2006