Se acercan las elecciones : la Consejería de Sanidad dice que ´en breve´ abrirá el hospital de enfermos mentales

Como buen indicio de que los políticos -al menos la gran mayoría- sólo trabajan un año de cada cuatro, el más próximo a las elecciones, la discutida Consejería de Sanidad del Gobierno regional, caracterizada por volcar todas sus atenciones e inversiones en Tenerife olvidando a Gran Canaria, aseguró ayer que las instalaciones del Hospital Juan Carlos I (antiguo Hospital Militar), destinadas a las unidades de media y larga estancia para enfermos mentales, abrirán "en breve", aunque sin precisar fecha.
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Precisamente la tardanza -ya que la Consejera "grancanaria" de Sanidad, María del Mar Julios, había anunciado en el verano de 2004 que las unidades de salud mental quedarían abiertas en el último trimestre de 2005- , han provocado la movilización de la Plataforma de Salud Mental, que esta misma semana ha anunciado una concentración ante el edificio del antiguo Hospital Militar para el próximo 27 de julio.

Al respecto, un portavoz de la Consejería no precisó si las obras de remodelación de las dos unidades mentales previstas, con capacidad para 120 camas, han concluido y también el amueblamiento de esa zona del edificio sanitario, que ocupa varias plantas del ala sur del hospital, situado en el barrio capitalino de San Francisco. La Administración sanitaria ha invertido apenas tres millones de euros en el proyecto de rehabilitación del inmueble adquirido al Ministerio de Defensa.

Esas obras, en concreto han supuesto la reforma de los casi 7.000 metros cuadrados en los que se ubican la unidad de rehabilitación activa (URA) y la unidad de estancia intermedia (UEI), con capacidad para 90 y 30 camas, respectivamente. Las camas se distribuyen en las cinco plantas del ala sur del hospital, mientras que en la baja se ubicará la zona de consultas médicas.

La primera de las unidades, la de rehabilitación activa, está destinada a pacientes con un ingreso de duración media entre seis meses y un año y con edades comprendidas entre los 18 y los 64 años. Por su parte, la unidad de estancia intermedia está destinada a aquellas personas con trastornos susceptibles de mejoría clínica, frente a los de la unidad anterior, con dolencias mentales de tipo crónico.