La peatonalización de calles en zonas comerciales aumenta el número de clientes y eleva el precio de los inmuebles

La peatonalización de la calle Mendizábal, una obra iniciada a finales del año pasado y que se prevé culmine durante el próximo mes de mayo, se está convirtiendo en un reclamo para empresarios y comerciantes. La transformación de esta arteria estratégica del casco histórico en un paseo traerá consigo la autorización de terrazas a los bares, y con ello, nuevas oportunidades de negocio. Según fuentes vecinales, las ofertas por locales vacíos se han disparado hasta el punto de ofrecer hasta 1.500 euros mensuales por establecimientos de pequeña superficie.
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Este boom comercial de Mendizábal causa sentimientos encontrados en el casco histórico. Alejandro Peñafiel, presidente de la asociación de vecinos Vegueta Santo Domingo, explicó ayer que, por un lado, se produce un beneficio para el barrio desde el punto de vista económico, pero por otro, causan preocupación los efectos que el tipo de negocio, eminentemente nocturno, que se prevé en la zona pueda traer de cara a los residentes.

"Estamos preocupados porque pensábamos que la peatonalización se iba a completar con árboles y no con terrazas, que seguramente traerán más ruido", precisó Peñafiel. El dirigente vecinal corroboró, sin embargo, el inusitado interés que ha despertado la calle entre los empresarios. "Por un local pequeño se ofrecen 1.500 euros", apuntó el representante ciudadano.

Alejandro Peñafiel vaticinó que si se cumplen las previsiones, la actual oferta comercial de la calle Mendizábal "se puede multiplicar por dos o por tres" cuando se terminen las obras. Actualmente, en esta vía están abiertos unos ocho establecimientos, entre bares, cafeterías y restaurantes. Sin embargo, hay locales cerrados, viviendas deshabitadas y negocios que pueden cambiar de sector si se mantienen las ofertas empresariales.

Desde el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, el concejal de Planeamiento y Gestión Urbanística, Felipe Afonso, que además tiene las competencias del área de Patrimonio, confirmó ayer que es probable la extensión de permisos para terrazas en Mendizábal cuando acaben las obras, pero aclaró que esos establecimientos tendrían un horario restringido de apertura.

"Serán terrazas de mesas y sillas, pero no de copas", concretó Afonso, que consideró "lógico" el interés empresarial en la futura calle Mendizábal, aunque aseguró desconocer que ya existieran ofertas por hacerse con locales. "Siempre que se produce una adecuación de los espacios urbanos", dijo, "se genera vida y eso trae demanda".

En todo caso, Mendizábal lleva varios años siendo uno de los puntos de encuentro de la noche de Las Palmas de Gran Canaria, con la apertura de varios locales de ocio. Esta calle se encuentra junto al corazón de la marcha de copas de Vegueta, que se extiende por las vecinas arterias de Pelota y Herrería, y la plaza Mesa de León, junto al teatro Guiniguada. Al otro lado del barranco, ya en Triana, se extiende el resto de la franja nocturna del casco histórico, con núcleo en el centro comercial Monopol.