Mientras Gran Canaria sigue infradotada de inversiones sanitarias, el Gobierno de Canarias inaugura una nueva unidad de psiquiatría en Tenerife

La consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, María del Mar Julios, inauguró este pasado viernes la nueva unidad de rehabilitación psiquiátrica de Santa Cruz de Tenerife, centro de referencia que cuenta con 72 camas de larga estancia y que albergará a sus primeros pacientes a partir del lunes.
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Julios, que estuvo acompañada de la consejera de Asuntos Sociales del Cabildo de Tenerife, Cristina Valido, explicó que el objetivo de esta unidad es evitar que se hagan crónicos los problemas de salud mental, de ahí su función de rehabilitación.

Esta Unidad de Rehabilitación Activa (URA), dependiente del Consorcio Sanitario de Tenerife, forma parte de la respuesta integral de salud mental, integrada también por las unidades de salud mental comunitarias, el Hospital de Día Infanto-Juvenil Doctor Guigou, las unidades de internamiento breve y la Unidad de Subagudos, informó la Consejería de Sanidad.

La unidad de rehabilitación está en el edificio que ocupaba anteriormente en el barrio de Salamanca de la capital tinerfeña la Unidad de Agudos del Hospital Psiquiátrico, que ha sido acondicionado por completo y alberga también en una de sus plantas las 24 camas de la unidad de subagudos, ya en funcionamiento. Las otras tres plantas del edificio son las de la nueva URA, cuyas obras, con una inversión de 2,2 millones de euros, han sido financiadas por el Gobierno de Canarias.

La URA y la unidad de subagudos comparten los espacios y servicios comunes, como comedores, talleres, áreas exteriores, despachos y oficinas. Las instalaciones están pensadas para pacientes psiquiátricos de 18 a 64 años que precisen de intervenciones terapéuticas integradas, biológicas, psicológicas y psicosociales para periodos de entre seis meses y un año.

Son enfermos que presentan alteraciones graves en sus hábitos de convivencia y que precisan de tratamientos más especializados que los que se dan en las unidades ambulatorias de salud mental comunitarias y las hospitalarias de agudos y subagudos. La terapia consiste en la intervención precoz en los aspectos de la enfermedad psiquiátrica susceptibles de rehabilitación, para disminuir los riesgos de "cronificación".

Para la atención de los pacientes en esta URA están destinados un psiquiatra coordinador, un psicólogo clínico, un trabajador social, siete enfermeras, 24 auxiliares de enfermería, tres monitores ocupacionales y auxiliares administrativos. A este equipo se unirán cinco enfermeros y cinco auxiliares de enfermería más.

Según informó la Consejería de Sanidad, a estas instalaciones se sumarán en el futuro en el barrio de Salamanca un centro de salud, una unidad de rehabilitación y fisioterapia, un centro especializado de atención a las urgencias, una unidad de salud mental que sustituirá a la actual, un centro de día y dependencias complementarias al área de hospitalización de la URA, como talleres, sala de terapia y área administrativa.