La instalación del NAP en Tenerife creará allí más de 3.000 puestos de trabajo
El presidente del Cabildo tinerfeño, Ricardo Melchior, calcula que el punto neutro de interconexión a internet (NAP) creará más de 3.000 puestos de trabajo directos e indirectos, basándose para ello en las cifras del centro de Miami. Confirma que ya ha recibido propuestas de empresas e instituciones africanas.
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El presidente del Cabildo, Ricardo Melchior, calcula que la ubicación del punto neutro de interconexión a internet (NAP en las siglas en inglés) en Tenerife supondrá la creación de unos 30 puestos de trabajo directos y alrededor de 3.000 indirectos. Con esta estimación, Melchior enumera una de las múltiples ventajas a nivel social, tecnológico y económico de un nodo de comunicaciones "que situará a Canarias como una plataforma de intercambio de información entre América, Europa y África".
El presidente estima esta cantidad basándose en un cálculo aproximado en comparación con el NAP de Miami. Éste genera unos 300 puestos de trabajo directos y 30.000 indirectos. Apoyándose en tales cifras, Melchior establece que el NAP tinerfeño sería un 10% del americano, concluyendo que en Tenerife se crearían unos 30 o 40 puestos de trabajo directos y unos 3.000 indirectos.
Melchior hace hincapié en este asunto señalando que "se trata de puestos de trabajo de personas altamente cualificadas que generan estabilidad en una sociedad, lo que a todas luces es necesario para ser competitivos en el mundo de la globalización".
Para llevar a cabo el proyecto, el Cabildo ha contratado los servicios de la multinacional americana Terremark, especializada en la instalación de NAP. Esta empresa está realizando el estudio de viabilidad que establecerá la ubicación, el tamaño y la financiación necesaria para acometerlo. La fecha prevista para culminar con esta primera fase se sitúa en diciembre. Aunque muchos aspectos están sin concretar, el presidente de la corporación insular apunta algunos datos acerca de las cuestiones monetarias del futuro NAP.
Financiación
Aunque en un primer momento el presupuesto se situó entre los 13 y 41 millones de euros, hay que esperar a que el estudio de viabilidad delimite la dimensión del centro para especificar la inversión necesaria y la forma en la que se va a realizar dicha inversión.
El presidente del Cabildo pone sobre la mesa unas proporciones inversoras que, a su juicio, serán las más probables. Así, Melchior entiende que un tercio del NAP será de la propia Terremark, otro tercio pertenecerá a las instituciones públicas y privadas canarias (ayuntamientos, cabildos y empresas) y, el último tercio lo adquirirán empresas privadas e instituciones públicas africanas. A este respecto, el presidente afirma que "aunque hasta el momento no nos hemos movido en la búsqueda de los inversores canarios, ya existen asociaciones empresariales de las islas que han manifestado su interés en este asunto".
En lo que se refiere a las empresas africanas, el presidente confirma que "tenemos algunas manifestaciones claras de interés que en estos momentos se traducen en una declaración de intenciones, puesto que todavía es difícil cuantificar el coste del NAP".
Al hilo de las cuestiones financieras, el titular del Cabildo anunció que, con el objetivo de que este proyecto pertenezca a todos los canarios, mantendrá conversaciones con el Cabildo de Gran Canaria cuando se dispongan de datos más concretos. Matiza que hablará "con franqueza e interés, ya que estoy convencido de que el NAP favorece a toda Canarias".
El proyecto del Gobierno
El intento por implantar esta infraestructura tecnológica no es nuevo. Según Melchior, "el anterior Gobierno de Canarias ya había mantenido conversaciones con Terremark, de las que yo no sabía nada y que, por un motivo u otro, no avanzaron lo suficiente". Además, el titular de la Corporación insular cuanta con datos de que el actual Gobierno de Canarias tenía pensado establecer algo parecido al NAP entre Tenerife y Gran Canaria.
Sin embargo, afirma que la gestación del proyecto por parte del Cabildo comenzó tan sólo tres meses atrás. "Cuando nos acercamos a Terremark -explica Melchior- la empresa ya preveía la ubicación de un NAP en otro lugar fuera de Canarias y de la Unión Europea". Según el presidente, "cuando supe del proyecto me puse en contacto con la empresa, con la que hubo en todo momento total confianza y entendimiento".
Ahora, cuando el proyecto está en vías de desarrollo y a punto de convertirse en una realidad, Melchior manifiesta que "estoy plenamente convencido de que participará el Gobierno de Canarias, ya que un proyecto tan importante requiere del esfuerzo de todos para aprovechar esta oportunidad que nos han brindado".
A la espera del estudio.- Aún no está definido el lugar de ubicación, aunque Granadilla se apunta como candidata porque el ITER tiene allí unos terrenos disponibles. En el estudio se barajan todas las posibilidades, debido a que, según explica el presidente, "no es lo mismo un macroNAP con un megacentro que un NAP que vaya creciendo a medida que se vaya desarrollando y se vayan conectando diferentes países". "Lo normal -continúa Melchior- es ir creciendo para no ocupar más terreno que el necesario en un territorio limitado como es Tenerife".
Clave para el desarrollo
Ricardo Melchior no duda en asegurar que "sería un hito importante y un paso gigantesco para Canarias la instalación del NAP, porque nos convertiríamos en una sociedad del conocimiento, de la información". El NAP abriría la posibilidad a Tenerife de ofrecer a nivel internacional algo más que un destino turístico de sol y playa, porque "tendríamos la oportunidad de constituir una referencia a nivel logístico, tecnológico e informativo".
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El presidente del Cabildo, Ricardo Melchior, calcula que la ubicación del punto neutro de interconexión a internet (NAP en las siglas en inglés) en Tenerife supondrá la creación de unos 30 puestos de trabajo directos y alrededor de 3.000 indirectos. Con esta estimación, Melchior enumera una de las múltiples ventajas a nivel social, tecnológico y económico de un nodo de comunicaciones "que situará a Canarias como una plataforma de intercambio de información entre América, Europa y África".
El presidente estima esta cantidad basándose en un cálculo aproximado en comparación con el NAP de Miami. Éste genera unos 300 puestos de trabajo directos y 30.000 indirectos. Apoyándose en tales cifras, Melchior establece que el NAP tinerfeño sería un 10% del americano, concluyendo que en Tenerife se crearían unos 30 o 40 puestos de trabajo directos y unos 3.000 indirectos.
Melchior hace hincapié en este asunto señalando que "se trata de puestos de trabajo de personas altamente cualificadas que generan estabilidad en una sociedad, lo que a todas luces es necesario para ser competitivos en el mundo de la globalización".
Para llevar a cabo el proyecto, el Cabildo ha contratado los servicios de la multinacional americana Terremark, especializada en la instalación de NAP. Esta empresa está realizando el estudio de viabilidad que establecerá la ubicación, el tamaño y la financiación necesaria para acometerlo. La fecha prevista para culminar con esta primera fase se sitúa en diciembre. Aunque muchos aspectos están sin concretar, el presidente de la corporación insular apunta algunos datos acerca de las cuestiones monetarias del futuro NAP.
Financiación
Aunque en un primer momento el presupuesto se situó entre los 13 y 41 millones de euros, hay que esperar a que el estudio de viabilidad delimite la dimensión del centro para especificar la inversión necesaria y la forma en la que se va a realizar dicha inversión.
El presidente del Cabildo pone sobre la mesa unas proporciones inversoras que, a su juicio, serán las más probables. Así, Melchior entiende que un tercio del NAP será de la propia Terremark, otro tercio pertenecerá a las instituciones públicas y privadas canarias (ayuntamientos, cabildos y empresas) y, el último tercio lo adquirirán empresas privadas e instituciones públicas africanas. A este respecto, el presidente afirma que "aunque hasta el momento no nos hemos movido en la búsqueda de los inversores canarios, ya existen asociaciones empresariales de las islas que han manifestado su interés en este asunto".
En lo que se refiere a las empresas africanas, el presidente confirma que "tenemos algunas manifestaciones claras de interés que en estos momentos se traducen en una declaración de intenciones, puesto que todavía es difícil cuantificar el coste del NAP".
Al hilo de las cuestiones financieras, el titular del Cabildo anunció que, con el objetivo de que este proyecto pertenezca a todos los canarios, mantendrá conversaciones con el Cabildo de Gran Canaria cuando se dispongan de datos más concretos. Matiza que hablará "con franqueza e interés, ya que estoy convencido de que el NAP favorece a toda Canarias".
El proyecto del Gobierno
El intento por implantar esta infraestructura tecnológica no es nuevo. Según Melchior, "el anterior Gobierno de Canarias ya había mantenido conversaciones con Terremark, de las que yo no sabía nada y que, por un motivo u otro, no avanzaron lo suficiente". Además, el titular de la Corporación insular cuanta con datos de que el actual Gobierno de Canarias tenía pensado establecer algo parecido al NAP entre Tenerife y Gran Canaria.
Sin embargo, afirma que la gestación del proyecto por parte del Cabildo comenzó tan sólo tres meses atrás. "Cuando nos acercamos a Terremark -explica Melchior- la empresa ya preveía la ubicación de un NAP en otro lugar fuera de Canarias y de la Unión Europea". Según el presidente, "cuando supe del proyecto me puse en contacto con la empresa, con la que hubo en todo momento total confianza y entendimiento".
Ahora, cuando el proyecto está en vías de desarrollo y a punto de convertirse en una realidad, Melchior manifiesta que "estoy plenamente convencido de que participará el Gobierno de Canarias, ya que un proyecto tan importante requiere del esfuerzo de todos para aprovechar esta oportunidad que nos han brindado".
A la espera del estudio.- Aún no está definido el lugar de ubicación, aunque Granadilla se apunta como candidata porque el ITER tiene allí unos terrenos disponibles. En el estudio se barajan todas las posibilidades, debido a que, según explica el presidente, "no es lo mismo un macroNAP con un megacentro que un NAP que vaya creciendo a medida que se vaya desarrollando y se vayan conectando diferentes países". "Lo normal -continúa Melchior- es ir creciendo para no ocupar más terreno que el necesario en un territorio limitado como es Tenerife".
Clave para el desarrollo
Ricardo Melchior no duda en asegurar que "sería un hito importante y un paso gigantesco para Canarias la instalación del NAP, porque nos convertiríamos en una sociedad del conocimiento, de la información". El NAP abriría la posibilidad a Tenerife de ofrecer a nivel internacional algo más que un destino turístico de sol y playa, porque "tendríamos la oportunidad de constituir una referencia a nivel logístico, tecnológico e informativo".
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