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La Voz de Gran Canaria

Los problemas económicos del Ayuntamiento de Telde obliga al centro de toxicómanos de Yrichen a endeudarse con los bancos

Los problemas económicos del Ayuntamiento de Telde obliga al centro de toxicómanos de Yrichen a endeudarse con los bancos

La mala gestión económica de los fondos públicos que ha llevado a cabo el Ayuntamiento de Telde en la presente legislatura continúa sin hacer distingos. La fundación Yrichen, una de las ONG más reputadas del municipio por el cuidado y tratamiento que presta a personas con problemas de adicción a las drogas, se ha visto ahora obligada a suscribir una póliza de crédito por importe de 100.000 euros al ver cómo las distintas ayudas y subvenciones que tenía acordadas con la Institución aún no se han hecho efectivas.
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Según los datos a los que ha tenido acceso este medio, la Corporación adeuda del orden de 70.000 euros a una fundación de La Pardilla y que, sólo en 2004, atendió a 768 pacientes gracias a sus 27 empleados estables y 30 voluntarios. Esta cantidad, acumulada a lo largo de los años 2005 y 2006, se deviene de distintas aportaciones que sirven para que Yrichen pueda pagar a su personal. La demora en su entrega, algo hasta la fecha poco habitual por parte del Ayuntamiento de Telde, ha terminado por pasar factura a la ONG, que lleva a cabo distintos programas de reinserción social y sigue sin saber cuándo podrán disponer de estos fondos.

La implicación del grupo de gobierno con Yrichen ha quedado demostrada en reiteradas ocasiones, siendo la actual titular de Desarrollo Local, María del Carmen Castellano, una de las personas que más se han volcado en la supervivencia de la fundación, sumida en una delicada situación económica desde hace un par de ejercicios.

El nombre de Yrichen se suma ahora a una larga lista de ´acreedores´ de la que también participan otros colectivos, como es Cruz Roja. La entidad tiene pendiente de recibir un total de 186.000 euros para hacer frente al mantenimiento de los tres hogares del casco donde se atienden a los menores en situación de riesgo. Esta ONG también se encarga cada verano de prestar el servicio de vigilancia en las playas gracias a un convenio que debe de respaldar con fondos del Consistorio.

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