Las Palmas de Gran Canaria sufre más su condición de capital que Santa Cruz de Tenerife

Los ayuntamientos de Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife han iniciado juntos un largo camino hasta el Estatuto de Capitalidad, una ley que les otorgará nuevos ingresos públicos para compensar su condición de capitales de Canarias. Pero la forma en que llegarán ambas ciudades al final del recorrido es bien diferente en atención a los datos que atesoran: el municipio cabecera grancanario supera en todos los números (población, presupuestos, ingresos por impuestos, parque móvil, infraestructuras y equipamientos, por citar sólo algunos sectores) al tinerfeño.
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Sin embargo, los promotores del proyecto, la alcaldesa Pepa Luzardo y el alcalde Miguel Zerolo aún no han definido si el reparto presupuestario será lineal o proporcional a lo que ambas aportan al Archipiélago, sino simplemente "equitativo". Falta por ver si como es costumbre, los representantes grancanarios tendrán miedo de pedir más que sus homónimos tinerfeños, aunque los datos sean más que justificados para ello.

Asi pues, los números revelan que aunque el Estatuto de Autonomía de Canarias establezca la doble capitalidad en igualdad de condiciones en las dos ciudades, algo que no se atreve a discutir ninguna fuerza parlamentaria, el mayor peso de ser municipio de cabecera lo soporta Las Palmas de Gran Canaria, especialmente en el parámetro poblacional.

La capital grancanaria tiene cerca de 379.000 habitantes según el último padrón oficial, por menos de 222.000 Santa Cruz de Tenerife. El área metropolitana de ambas ciudades también se inclina, por mayor peso poblacional, del lado del municipio palmense: 162.000 personas que se reparten entre los territorios limítrofes de Telde (97.000), Arucas (34.000), Santa Brígida (19.000) y Teror (12.000); frente a los 158.000 vecinos empadronados en los dos únicos ayuntamientos tinerfeños que lindan con el santacrucero: La Laguna (142.000) y El Rosario (16.000). La diferencia es del 70 por ciento. El único número a favor del lado tinerfeño es de carácter insular: 839.000 frente a los 802.000 grancanarios.

Pero además de las diferencias poblacionales, también las hay de índole económica. Según datos correspondientes a 2004, en Las Palmas de Gran Canaria hay más de 179.000 personas empleadas y cerca de 28.000 paradas. Estos números son muy lejanos a los que arroja Santa Cruz de Tenerife: 116.000 empleados y 12.000 desempleados, pero también lo son sus porcentajes de paro: 13,5 por ciento entre los palmenses y 9 por ciento, entre los santacruceros. Pero un dato relevante es el número de contribuyentes: 116.000 frente a 66.000, casi el doble.

También en los ingresos por persona hay diferencias, pero esta vez a favor de Santa Cruz de Tenerife, cada uno de cuyos ciudadanos percibe 566 euros mensuales, por 547 euros los grancanarios. En cambio, la situación familiar es al contrario. En un hogar de la capital tinerfeña entran mensualmente 1.686 euros, siete euros menos que en Las Palmas de Gran Canaria. El índice de pobreza, en cambio, está equilibrado: un 20,4 por ciento en la capital grancanaria y un 20,6 por ciento, en la tinerfeña.

La esfera económica arroja más resultados diferenciadores. Por ejemplo, Las Palmas de Gran Canaria reúne 443 oficinas bancarias por 277 Santa Cruz de Tenerife. Además, la ciudad palmense cuenta con 1.214 bares por 856 la santacrucera y más de 8.500 plazas hoteleras y extrahoteleras frente a las apenas 2.100 de la ciudad chicharrera.